La idea del dorado (dorado oscuro en este caso) parece nublar la razón de los que se creen dueños de este frágil rincón del planeta. Parece que el hecho de que (casi) todas las zonas poseedoras de reservas importantes de este recursos son zonas con complicados regímenes políticos y grandes desigualdades sociales.
Ante los desmanes de unos pocos, ya miles de Canarios han confluido en las redes sociales para cantar a todo el mundo unas Polkas Majoreras,
rimas fruto del ingenio,
y de largas tradiciones,
que se cantan en las fiestas,
pa' alegrar los corazones.
Canarias dice no a las petroleras, a pesar de que sus administradores políticos simplemente piensen en lo mejor para el pueblo, como hace unos años, sin contar con el pueblo.
¿Dónde está el problema? Prosperidad como en Noruega. Este es el argumento que esgrimen los que han hablado en medios públicos. ¿Por qué no dicen prosperidad como Iraq? ¿O Kuwait? ¿O Libia? ¿O Barhein? ¿O Arabia? ¿O...? ¿Seguimos?
Los recursos energéticos son el primer objetivo en un conflicto. En Canarias sufrimos las consecuencias de las Guerras Mundiales, como todo el mundo, pero por suerte aquí no llegó el frente porque poco tuvimos que ofrecer a la guerra.
Con esto no quiero decir que Canarias no tenga cosas que ofrecer, pero por suerte, a día de hoy somos más prósperos y podemos aportar más al mundo en la paz que en la guerra. Un sistema de extracción de recursos energéticos, en un lugar estratégico como el que poseemos, no nos traerá más que problemas, disgustos y llantos. Nada bueno traerá a la población (salvo para dos o tres). Y no, no compensa.
Es verdad que no hay que hacer las cosas pensando siempre en lo peor, pero la riqueza de unos pocos, no vale el riesgo de todos. Canarias posee recursos naturales de todo tipo, de eso se ha encargado la madre tierra. Sol, viento, barranqueras (Presas y saltos de agua), mareas, geotermia, Somos un territorio excelente para convertirnos en la vanguardia energética del planeta. Pero insistimos en apostar en energías del siglo XX como si no viviésemos en el XXI. Como si mañana se fuese a inventar el motor de combustión y como si los ingenieros más punteros andasen inventando nuevas centrales eléctricas basadas en el petróleo.
No sé que pretenden los políticos, pero lo sospecho, y es triste. Sólo espero que sepan realmente lo que hacen, porque más triste sería que estén haciendo esto por ignorancia en vez de ambición. Aún así, espero que quien sea responsable de esto tenga un mínimo de ética, así sabría que su conciencia no le permitiría dormir bien por las noches, y así, por lo menos, empezaría pagar por su responsabilidad.
A los de las petropolkas,
Les animo a no callar,
Las palabras que se cantan,
No se pueden derrotar.
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